Desde pequeños, nuestros padres nos hicieron disfrutar con nuestros primeros amigos caninos, no fueron ni mucho menos estos pequeños y simpáticos compañeros sino perros de raza de gran tamaño.

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Cuando crecimos, nos fuimos a un pisito de ciudad, allí incorporamos a nuestras vidas el primer cachorrito de raza miniatura, una maltesa, la cual nos hizo vivir la primera experiencia con esta raza y pudimos experimentar el carácter dulce, noble y amistoso que caracteriza a los malteses.

 

Desde entonces no hemos podido separarnos de ellos, es tanta la conexión que nos une, desde el año 1988, que no nos hemos podido resistir y hemos ido aumentando poco a poco nuestra familia canina, no solo de malteses, sino de biewer, caniche toy, pomerania, teckel, chihuahua ymaltipoo.

 

Disponemos de los requisitos legales para tratar con nuestros mejores amigos, nuestras razas pequeñas y nuestros cachorros.

 

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